jueves, 20 de enero de 2011

EL TEMOR A EQUIVOCARNOS CUANDO TOMAMOS DECISIONES

Muchas veces nos hacemos la misma pregunta: ¿ Cuál fue mi error?, y la respuesta es paradójicamente simple: Ninguna.
Porque lo importante es vivir. Y uno aprende mientras vive. Cundo se plantea un problema hay que elegir una conducta. Pero uno elige con lo que es y con lo que tiene. Y después analiza los resultados. Pero lo hace después y reconoce el acierto o la equivocación. Mas cuando tuvo que tomar la decisión no tenía la experiencia que vino después.
Esa experiencia tal vez le servirá para un futuro, pero el futuro no es el ayer, es el mañana. Y en este mundo de permanente cambio mañana no es igual a ayer.
Se presentarán nuevas dificultades, sobrevendrán incógnitas y la elección será también igual que antes: el resultado de lo que uno es. O mejor de lo que uno "va siendo", no una permanente repetición, sino un ser vivo que se renueva día a día, que aprende y que valoriza lo que aprende, que acepta la vida como una corriente en constante transformación.
Entonces: ¿ hay que dejarse llevar por la corriente ?. No, hay que elegir lo mejor posible, con los ojos abiertos y la conciencia despierta. Pero sin el terrible temor a equivocarse. Hay que tratar de hacer las cosas lo mejor posible. Pero ese mejor posible es solo posible y no infalible. Cometemos errores pero son los humanos, no somos dioses omniscientes que todo lo saben.
Este temor a equivocarse se relaciona con la culpa y el castigo, como si estuviéramos siempre en el banquillo de los acusados y fuéramos niños temerosos que esperamos la punición. Y las cosas se agravan porque permanentemente nos inundan libros y publicaciones que afirman tener la verdad, sin recordar que la verdad absoluta no existe y que las aproximaciones a la verdad son sólo aproximaciones. Basta recorrer lo escrito en un lapso no demasiado extenso ara ver cómo se desmoronan las sentencias y las opiniones.
¿Cómo podríamos hacer para no equivocarnos?. Nos tendrían que poner bajo una campana de cristal, sin movernos, sin pensar, estáticos como objetos de museo. No nos equivocaríamos porque no haríamos nada. Pero eso no sería vivir. Si cometemos errores es porque vivimos.
Todos somos capaces de crear, si nos atrevemos. Atreverse es proponer nuevos juegos que no están avalados por la experiencia y en los que pondremos nuestro empeño, nuestro coraje, aunque podamos equivocarnos.
Y por juego entendemos la capacidad de inventar, de abrir nuevos horizontes, de proponer actividades diferentes, de acercarnos a la libertad.
Pero no estamos solos. No hacemos interminables monólogos. Sabemos y queremos dialogar. La frase: lo hice yo solo, ignora que ese yo solo abarca toda la historia de la humanidad, que nadie es producto de sí mismo, que es el resultado de todo un devenir.
Estamos acostumbrados a oír voces apocalípticas que nos llenan de espanto. Y en nombre de una responsabilidad nos obligan a ser perfectos o casi. Escudriñamos el pasado para conocer nuestros errores y los ajenos y avanzamos como guerreros empeñados en vencer. ¿ A quien ?. Al fantasma de nuestros temores, de nuestras obsesiones de fracaso, a nuestras angustias de ruina y soledad. Y por temor a equivocarnos vamos dejando muchas posibilidades de vivir en este nuestro mundo. Un mundo vasto y lleno de lo viejo y lo nuevo, pero que es nuestro y al que podemos modificar si no sucumbimos a los presagios terroríficos de los que no aman la vida.
Por ultimo les dejo una frase de una entrevista de Jack Welch quien fue CEO de General Electric en 1960.
“Si quieres que la gente se arriesgue, no puedes tener miedo de cometer errores. Debes premiar a los empleados que se arriesgan.” Como para demostrarlo, reconoció haber causado él mismo la explosión de una fábrica en un alarde temerario. “Si yo, que soy el presidente, puedo cometer errores de ese calibre y sobrevivir, imagínense lo que pueden hacer ustedes.”

                FUENTE: www.noronet.com

4 comentarios:

  1. Muy cierto que decidimos bassdos en lo que vamos siendo y que un "error" de una mala decisión es derivado de la deficiencia de experiencia/conocimiento que teníamos en ese momento. Coincido en que tenemos que romper la barrera al miedo por equivocarnos al decidir, sin embargo quiero complementar que eso no es facil cuando en la organización se toman represalias a las malas decisiones sin considerar las causas o situación que llevó a ello, adicional estos "castigos" fomentan mayor el temor a decidir y generan mayor daño a la empresa pues la paralizan, como expresa josue nadie decide por el temor a equivocarse y ser reprendido.

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  2. Ensayo y Error, es necesario correr riesgos sin tener miedo al resultado, en base a equivocarnos vamos aprendiendo a intentar de nuevo las cosas de una manera diferente.

    Reyna

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  3. Hola, es facil decirlo y en ocaciones nosotros somos muy duros y no queremos parecer vulnerables, pero el mostrarse enriquece al ser humano.
    me parece que las cosas llegan en su momento ni antes ni despues

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  4. Coincido en gran parte con Ruth. Decir es muy fácil, hacerlo.....eso como cuesta, y mostrarse como dice Ruth, también nos cuesta y mucho.....

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